Un niño de siete años provoca una carnicería en un zoologico australiano. Durante media hora dió de comer a un cocodrilo una tortuga, cuatro lagartos de lengua azul, dos dragones barbados, dos lagartos diablos espinosos y un varano de Spencer de 1,8 metros.
Y mi preguntas son:
¿dónde narices estaban los padres?
¿qué valores le han inculcado esos padres?
Corren malos tiempos, falta educación.